En un espacio que apunta a la integración, los artesanos históricos del lugar y emprendedores de la economía social ofrecen sus productos de miércoles a sábados a partir de las 10 Hs.
La Feria del Encuentro es un paseo de 30 puestos, con un área de alimentos, panificación, productos veganos, chipá, torta asada, galletas y dulces, un sector de artesanos de cultura con gran variedad de objetos en cuero, bijouterie, decoración, sahumerios y diseño, y un sector a cargo de jóvenes del Programa Nueva Oportunidad con verduras y huevos de la huerta “La Rosarina Linda” y un área de servicios de estética: peluquería y peinados, manicuría y limpieza de cutis.
Con la feria se mejoran las condiciones de los artesanos con paños al piso, que ahora tienen un lugar adecuado para ofrecer sus productos.
“Habilitar por segundo año consecutivo esta feria es señal de que vamos por el buen camino. Lo dijimos el año pasado, esta era una vieja deuda que teníamos con algunos emprendedores y artesanos, con los cuales nos habíamos comprometido a hacer una verdadera feria”, señaló la intendenta Mónica Fein..
“Acá estamos. Volvimos, porque es necesario darle una oportunidad a cada emprendedor, porque detrás de cada emprendedor hay una familia”, agregó.
“Hay que seguir generando espacios para emprendedores. Nuestra gestión los acompaña como ninguna otra”, sostuvo Fein, quien terminó diciendo: "Una ciudad que se basa en la inclusión social y el progresismo tiene que tener una política activa como tiene la Municipalidad de Rosario”.
La iniciativa es llevada adelante mediante las secretarías de Economía Social, Cultura y Educación y Desarrollo Social, que conforman –junto a Salud Pública– el Gabinete Social.
Estética al paso
El Programa Nueva oportunidad trabaja en los barrios convocando a jóvenes de 16 a 30 años que no estudian ni trabajan, y brinda herramientas de inserción laboral a través de la capacitación en oficios, esta experiencia empezó en Rosario y tiene alcance provincial. Entre las propuestas se destacan los servicios de estética: peluquería y peinados, manicuría y limpieza de cutis.Samantha, junto a 20 tímidas jóvenes que se capacitaron en el CECLA Nº 15 de barrio Saladillo –institución del Ministerio de Educación de la provincia que trabaja en articulación con el programa Nueva Oportunidad– se presentó en la Feria por primera vez.
“Vamos a estar en la feria brindando sus servicios de limpieza de cutis, peinados y peluquería, y manicuría. Nos capacitamos por 6 meses para llegar aquí, brindaremos un servicio al paso”, dijo Samantha, visiblemente entusiasmada al poder estar en las ferias. Cabe remarcar que será la primera que tendrá un área de Estética al Paso que funcionará de jueves a sábados.
Huerteros de “La Rosarina Linda”
“La Rosarina Linda” es un espacio de agricultura urbana que funciona en San Martín al 7200. Desde ese lugar traen a la Feria del Encuentro verduras frescas y agroecológicas, además de huevos.“Desde los 18 soy huertero, ahora tengo 23, me encanta trabajar la tierra” cuenta con entusiasmo Iván, quien junto a Elena, destaca la calidad de las verduras que “nosotros mismos cultivamos”.El coordinador de la huerta, Héctor Alarcón, agregó que en total son 40 los jóvenes que participan.
Nos va bastante bien con la huerta y con las gallinas de la que obtenemos huevos. Los chicos lo ven con buena perspectiva y la idea es que puedan vivir de eso, que tengan ese trabajo como forma de lograr sustento, a través de la agricultura urbana”, sostuvo.
Tejidos y costura
Ruth hace dos años está en el Programa Nueva Oportunidad, hizo distintos cursos y ahora está exponiendo productos tejidos y de costura, como artículos para bebé, delantales de cocina y reciclados.“Recién empezamos y la intención es que sea nuestro medio de vida, esta feria es un empujoncito para lo que realmente queremos hacer que es tejer, coser, reciclar. Esto es el comienzo y de acá no paramos, ¡No tenemos techo!”, remarcó, con mirada luminosa y voz esperanzada.
Panadería y repostería
Elina y Raquel venden productos de panadería y repostería. Ambas comenzaron en 2003 en las primeras experiencias de Ferias de Economía Social de la ciudad, y hoy con sus emprendimientos son sostén de la familia y dan cuenta del camino recorrido.
“Trabajo junto a mi esposo y ayudamos a nuestros hijos con este trabajo”, contó Elina.
Mientras que Raquel reconoce que ha crecido sin pausa en estos 15 años: “Se vende muy bien, somos una familia de 5 integrantes y todos trabajamos vendiendo en ferias, trabajamos 50 kilos de harina en la semana y 100 los fines de semana y además junto a mi esposo tenemos un comedor comunitario en el barrio, le damos de comer a 300 chicos”.
“Estamos muy agradecidos por el espacio que nos brinda la Municipalidad”, agregó.
Inciensos artesanales
Aromas exóticos llegan del puesto de Maga que elabora inciensos artesanales con una presentación muy vistosa y variedad de aromas. “Están hechos de harina de madera, fécula y perfumes, totalmente artesanales, incluso algunos tienen hierbas aromáticas”, indicó Maga.“Empecé junto a mi hijo vendiendo un producto comprado a terceros, investigamos para poder hacerlo nosotros mismos y nos fue muy bien. Cambié un trabajo convencional por éste, vendo en ferias de cultura y viajo con mis productos. Gracias a Dios vivo de esto y vivo bien”, relató la artesana, que participa de las ferias “Muy Rosarinas”.