“Resulta
inadmisible que un servidor atienda con vestimenta agraviante y ofensiva”.
Lo señala el concejal Carlos Cardozo, de Cambiemos, quien
precisa que “se piense como se piense, nunca se puede instalar desde una oficina
del Estado la violencia como discurso polìtico”.
En tal sentido el edil de Cambiemos presentó un pedido de
informes dirigido a la intendenta Mónica Fein y a las autoridades del Ente de
la Movilidad y de la Secretaría de Transporte y Movilidad, para que se responda
de “manera urgente y perentoria” respecto a la vestimenta de un empleado que
atiende el puesto de venta y recarga de la tarjeta Movi en el Centro Municipal
Distrito Sur, “donde en su puesto de atención al público lucía una remera con
la imagen del presidente de la Nación con un tiro en la frente y un charco de
sangre a su alrededor”.
Cardozo consigna en los fundamentos de la presentación
que “resulta repudiable tanto la actitud del empleado, sea este planta de la
Municipalidad de Rosario como del Ente de la Movilidad, por la imagen que lucía
en su vestimenta y más grave aún por lucirla en una oficina del estado
municipal”.
Igualmente precisa que “más allá de la actitud personal
del empleado estatal, también llama la atención que ningún superior le haya
llamado la atención durante toda su jornada laboral”.
Reitera por último el edil Cardozo que “se piense como se
piense, nunca se puede instalar desde una oficina del Estado la violencia como
discurso político”