Ante el inminente desalojo del club Infantil Valencia, los concejales de Cambiemos Alejandro Rosselló y Carlos Cardozo, encomendaron al municipio que evalúe la posibilidad de su traslado a los terrenos municipales ubicados en el Parque Oeste Dr. Ricardo Balbin.
En tal sentido, Rosselló explicó que “desde hace años, la referida institución viene desarrollando sus actividades en un predio de calle Perón al 5700. El mismo pertenece a un privado, quien oportunamente lo cedió mediante un comodato renovable cada tres meses”. Sin embargo, ante la reciente venta de los mismos surgió la imposibilidad del club de continuar en el lugar.
Asimismo, el edil expresó: “Creemos que el municipio está en condiciones de brindar una alternativa al inconveniente que hoy se presenta a esta institución y solicitamos que, debido a sus características, el Parque Oeste sea considerado como el nuevo lugar donde pueda funcionar”.
Por su parte, Cardozo señaló que “los clubes de barrio son para Rosario un patrimonio inigualable, es allí donde los niños y los jóvenes se alejan de las drogas. El club de barrio, la escuela y la familia son tres pilares fundamentales en la reconstrucción del tejido social que se vio vulnerado en los últimos tiempos”.
A su vez, indicó que “la pérdida de un club no sólo implica un complejo deportivo menos, sino la desaparición de un lugar de contención, recreación y participación de miles de jóvenes, porque esa es la principal función de los clubes en el interior. Estas asociaciones estimulan la actividad física, recreativa y de competición; promoviendo la enseñanza de nociones básicas de distintas disciplinas deportivas, sin distinción de sexo y garantizando la integración social del lugar”.
Para finalizar, los legisladores coincidieron en que “los clubes de barrio son el núcleo de una comunidad donde se presta especial atención a la niñez, adolescencia, juventud y familia”. “Las prácticas deportivas en los clubes de barrio disponen un efecto preventivo ante el consumo de drogas, el problema del tabaco y el alcohol que amenaza a los adolescentes”, concluyeron Cardozo y Rosselló.