Los operativos
llevados adelante entre la noche del jueves y la madrugada del lunes resultaron
en 28 vehículos remitidos al corralón por alcoholemia positiva. No se
registraron casos de narcolemia.
Con
el fin de garantizar una circulación segura y promover buenas conductas al
volante, la Municipalidad de Rosario realizó una serie de intervenciones
nocturnas durante el fin de semana en distintos puntos de la ciudad. Como
resultado, un total de 42 vehículos fueron remitidos al depósito municipal.
Del
total de los autos y motos retenidos, 28 tuvieron que ver con casos de
alcoholemia positiva mientras que el resto se relacionaron con incumplimientos
referidos a la documentación reglamentaria y condiciones de seguridad. El
porcentaje de alcohol en sangre más alto registrado fue de 1.53, casi un punto
por encima del límite máximo permitido. En esta oportunidad, no se registraron
casos de narcolemia.
Durante
uno de los procedimientos, llevado a cabo por la Secretaría de Control y
Convivencia municipal junto con efectivos de la Unidad Regional II de la
Policía de Santa Fe, se remitió un auto particular luego de que su conductor se
negara a realizar el test de alcoholemia. Además, se pudo establecer que
llevaba bebidas alcohólicas dentro del vehículo y que no contaba con todos los
documentos requeridos.