El
videojuego para móviles Pokémon go, desarrollado por la empresa estadounidense
Niantic y que desde su estreno mundial el pasado 6 de julio rompió todos los
récords de descargas, está disponible desde este miércoles en la Argentina.
El
título desarrollado por la empresa estadounidense Niantic y distribuido por la
japonesa Nintendo estaba disponible esta noche, de forma gratuita, tanto para
smartphones con Android como para iPhones.
El
juego, lanzado de forma escalonada -primero en Australia, Nueva Zelanda y
Estados Unidos, y luego en casi toda Europa-, también llegó este miércoles al
resto de los países de Centro y Sudamérica.
"Estamos
muy contentos de estar poniendo oficialmente a Pokémon Go en las manos de
nuestros fans de América Latina, los visitantes, y los atletas olímpicos en
río!", publicó en su perfil de Facebook la cuenta oficial del videojuego.
Los
usuarios de Twitter se hicieron eco rápidamente de la llegada del juego y el
término "Pokemon Go" se instaló primero entre los trending topics,
aunque dada su tan reciente llegada, esta noche aún no había cifras de cantidad
de descargas al menos en la tienda de aplicaciones de Google, según confirmaron
a Télam desde la empresa.
De
todas formas, es esperable que el videojuego alcance pronto el tope de la lista
de descargas, como sucedió en todos los países en los que está disponible.
Esta
semana Pokémon Go superó la cifra de las 100 millones de descargas a nivel
global, informó el sitio especializado TechCrunh en base a un informe de la
consultora App Annie, que reportó además que la franquicia le está generando a
sus creadores ganancias por alrededor de 10 millones de dólares diarios.
Para
ponerlo en contexto: solo en sus primeros siete días Pokemon Go había
pulverizado la marca que en Estados Unidos registraba el masivo Candy Crush, hasta
entonces el rey de los juegos para móviles.
Parte
de su éxito, coinciden los analistas, radica en una notable utilización de la
realidad aumentada, que permite colocar elementos virtuales en el mundo real;
utilizando la cámara de su smartphone -y el GPS y el reloj-, el jugador debe
recorrer calles, plazas o puertos para descubrir y coleccionar alguno de los
151 personajes del universo fantástico de Pokemon, la serie japonesa de dibujos
animados surgida en los 90.
A
medida que el jugador se mueve y en función del lugar y la hora, estas
criaturas van apareciendo en la pantalla del teléfono para que el usuario los
capture.
En
los últimos días fueron muchas las ciudades en las que se vieron grupos de
personas que recorren calles y plazas mirando las pantallas de sus teléfonos,
mientras otras (como Río de Janeiro, a pedido de su alcalde Eduardo Paes)
venían reclamando su llegada y algunos sitios pedían su prohibición.
Entre
estos últimos están por ejemplo las japonesas Hiroshima y Nagasaki, que
pidieron que las criaturas de Pokémon Go no aparezcan en sus respectivos
Parques de la Paz, o la planta de Fukushima, cuyas autoridades le exigieron a
Niantic que las criaturas no aparezcan cerca de la zona de exclusión nuclear.
También
pidieron su exclusión los antiguos campos de concentración de Alemania, museos
estadounidenses (como el Museo del Holocausto y el Cementerio Nacional de
Arlington, en Washington) y Arabia Saudita, cuya más alta institución islámica
del país emitió un dictamen que prohíbe el juego en todo el país.