El desembarco de la
empresa generó un fuerte rechazo de los gremios de taxistas y opiniones
divergentes de usuarios. El gobierno porteño remarcó que "no es
legal" su posible funcionamiento. Cinco mil personas se anotaron el primer
día.
El
lanzamiento de una convocatoria para que propietarios de automóviles se
inscriban en el sistema de la empresa Uber para trasladar personas de un punto
a otro de la Ciudad de Buenos Aires, generó un fuerte rechazo de los gremios de
taxistas y opiniones divergentes de usuarios, mientras el gobierno porteño
remarcó que "no es legal" el posible funcionamiento de Uber.
El
sistema, que está presente en todo el mundo aunque en muchos países existen
fuertes resistencias a su funcionamiento, propone que cualquier persona,
propietaria y con licencia de conducir, sea "socio conductor" de la
empresa y realice viajes para lo cual los pasajeros abonan con su tarjeta de
crédito a través de una aplicación en el celular.
El
titular del gremio de conductores de taxis de la Ciudad de Buenos Aires, Omar
Viviani, afirmó que "bajo ningún concepto" el sindicato dejará que se
instale en el país Uber, la aplicación para solicitar viajes con choferes
particulares, y consideró que lo que pretende la empresa estadounidense es
"desregular todo el sistema".
"Como
esto es todo tecnología, ahora han contratado algunos CEO para ver si arman el
servicio. Pero con nosotros van a tener inconvenientes porque no lo vamos a
permitir", aseguró el sindicalista y adelantó que el 6 de abril el gremio
discutirá este tema en una asamblea en la que se declararán en "estado de
alerta y movilización".
Fuentes
del gobierno porteño aseguraron a Télam que "existe una ley que regula el
funcionamiento de los taxis y de las empresas de radiotaxis que detalla que
cualquier persona puede pedir un vehiculo de alquiler por teléfono pero para
ello la empresa debe cumplir ciertos requisitos como poseer un local físico,
una antena para hacer las radiollamadas, empleados y una flota de un número
determinados de autos".
El sistema está
presente en todo el mundo aunque en muchos países existen fuertes resistencias
a su funcionamiento
"El
tema de Uber hace rato que se viene conversando, hoy salió a la luz porque la
empresa lanzó la convocatoria pero su funcionamiento sería ilegal porque no
cumple con esta ley que regula a las empresas. En las conversaciones que
mantuvimos adujeron que ellos son una empresa de tecnología y no de transporte,
con lo cual dimos por terminadas las conversaciones", precisó la fuente.
Indicó
además que el taxi "reúne ciertas características de seguridad que es
aceptada por el 70% de los porteños y Uber no tiene estos requisitos y
funcionar sin un marco regulatorio es ilegal".
Por
su parte, Fabián Pons, director del Observatorio Vial Latinoamericano (Ovilam),
destacó que en Latinoamérica hay ciudades como Santiago (Chile), Montevideo
(Uruguay), Bogotá (Colombia) o Ciudad de México (México) en las que, además de
contar con colectivos, taxis y remises, se han implementado estas APP con gran
éxito.
Pons
detalló además que "un dato no menor es que el 30% de los usuarios han
respondido que el principal motivo por el que eligen estas plataformas es la
seguridad personal y un 70% han colocado este atributo entre los tres primeros
a la hora de tomar su decisión de uso".
Consideró
que las resistencias iniciales a los nuevos paradigmas "son lógicas, pero es
imposible oponerse a los avances tecnológicos que cada día son más profundos y
más rápidos".
El
desembarco de la aplicación -que comenzó a funcionar en los Estados Unidos en
2009- generó en los últimos años protestas en distintas ciudades del mundo.
Uber,
que se expandió rápidamente desde que fue lanzado por dos emprendedores
tecnológicos, Travis Kalanick y Garrett Camp, opera en más de 400 ciudades en
decenas de países, según informa la empresa en su sitio web.
En
Sudamérica el servicio ya está disponible en varias ciudades de Colombia,
Brasil, Perú, Chile y Uruguay.
El
tema también fue Trending Topic en las redes sociales y diversos usuarios de
Twitter opinaron: "#UberArg Bienvenido seas, un mercado libre es
beneficioso para todos", escribió @GonzaMonti, mientras que otra usuaria,
@Memilia, destacó el funcionamiento de este servicio en Brasil, donde aseguró
que es "un suceso y de super confianza".
Entre
las opiniones contrarias, el usuario @withpoeticeyes consideró que "el
problema con #UberArg es que es otra forma de flexibilización laboral, otra
forma de quitarle a los trabajadores de sus derechos", mientras que
@marosc27, quien dice trabajar como remisero y pagar muchos impuestos, calificó
a Uber de "competencia desleal".
En
tanto Christian Ripoli, dueño de dos taxis con chofer, dijo a Télam que
"nosotros pagamos cargas sociales a nuestros choferes y los resgistramos
en Sacta y estamos a derecho con la legislación que regula este transporte en
la Ciudad de Buenos Aires".
"Nosotros
circulamos por las calles y levantamos pasajeros en cualquier parte que esté
permitido" dijo Christian, y agregó: "No creo en un primer momento
que cualquier usuario que necesite tomar un taxi arriesgue su tarjeta de
crédito para realizar un viaje y no tener la seguridad como la tenemos nosotros
para trasladar al pasajero".
Y
detallo: "Pagamos más de dos mil pesos de seguro para transportar al
pasajero y lo tenemos que acreditar, en cambio ellos no lo pueden hacer porque
no tienen la legislación para hacerlo".