Los
mismos se llevan a cabo a partir de la confirmación de un caso, circunstancia
en la cual se acciona en los alrededores del domicilio del paciente.
La
Secretaría de Salud Pública municipal ratificó que son 24 los casos de dengue
confirmados en la ciudad de Rosario, y en este marco, la Municipalidad de
Rosario, a través de los equipos de Salud, Control y Convivencia y Ambiente y
Espacio Público cuenta con un protocolo articulado que involucra el bloqueo
sanitario de las zonas donde se detectó cada uno de los casos con el propósito
de prevenir la propagación de la enfermedad.
En
este sentido, las autoridades sanitarias remarcaron que es importante conocer cómo
y por qué se realizan los bloqueos a fin de colaborar con los equipos en el
territorio. A la vez, se recomienda a la población reforzar las tareas de
prevención manteniendo limpios los patios, eliminando los recipientes que
puedan acumular agua o limpiándolos diariamente.
Ante
la presencia de algunos de los síntomas de estas enfermedades, no automedicarse
y concurrir inmediatamente a la consulta médica.
En qué consiste el
bloqueo sanitario
Al
confirmarse un caso de dengue, chikungunya o zika, se pone en marcha en la
ciudad un protocolo en conjunto articulado entre diferentes áreas del
municipio. De este modo, se disparan en el territorio una serie de acciones
mediantes las cuales se busca bloquear o prevenir cualquier otro posible caso
en los alrededores del confirmado.
A
partir de confirmarse el diagnóstico de una persona con dengue, chikungunya o
zika, se toma la vivienda de la persona infectada con su manzana como
referencia y ocho manzanas alrededor, es decir nueve manzanas en total. Esto se
debe a que ese rango es la máxima distancia que puede volar un mosquito adulto
infectado.
Una
vez delimitada esta área, se accede a los domicilios correspondientes y se
comienza con el descacharrado, es decir, con la limpieza de los patios,
explicándole al vecino la importancia de esta acción, ya que es la única
efectiva para eliminar las larvas y prevenir la reproducción del mosquito.
Además
se procede a la búsqueda de febriles, personas en esos domicilios que puedan
tener los síntomas de dengue, chikungunya o zika o los hayan tenido en días
anteriores. De encontrarse alguno, se inicia el proceso correspondiente para
confirmar si también tiene alguna de estas enfermedades.
Por
último, el equipo de la Dirección de Vectores fumiga la zona para eliminar
mosquitos adultos, evitando así la probabilidad de que un vector infectado
pueda picar a otra persona. Cabe recalcar que las tareas de fumigación se
realizan muy controladamente, ya que junto con el Aedes aegypti también se
destruyen muchas otras especias que regulan la fauna, como otros mosquitos o
alguaciles.
A
su vez, se entrega a las familias involucradas repelente para evitar el
contagio y larvicidas para aplicar en recipientes que es imposible limpiar o
vaciar, como estanques y piletas, para evitar la reproducción del Aedes
aegypti.
Una
semana después del primer bloqueo se repite la acción en la misma área para
descartar la aparición de nuevos casos.