Rosario
Las personas mayores son con el incremento de la
edad, más vulnerables, más frágiles. Por otra parte, son maltratados y
discriminados en muchos aspectos, económicos, políticos, psicológicos y
sociales, e indudablemente sufren el maltrato por múltiples creencias, mitos y
prejuicios sociales: “No son ya más útiles a la sociedad sino representan una
carga social”.
El Concejo Municipal aprobó el
proyecto de Ordenanza de los concejales Héctor J. Cavallero, Lorena Giménez
Belegni y Ma. Fernanda Gigliani, mediante el cual solicitan se establezca en
los supermercados de un cajero prioritario para mayores de 65 (sesenta y cinco)
años.
Se fundamenta el proyecto en
los reiterados reclamos de la necesidad de mejorar la atención a las personas mayores en los
supermercados. Luego del retiro laboral, quedan en desventaja con respecto al
resto de la población en cuanto a que sus ingresos económicos son
sustancialmente reducidos cuando pasan a cobrar sus haberes jubilatorios,
excepto un reducido sector que tiene otros ingresos por seguir con otros
trabajos, rentas, etc.
La población de personas
mayores de 65 años en la ciudad de Rosario comprende un 12,5% aproximadamente
de toda su población, vale decir, unos 125.000 ciudadanos repartidos en su
ejido urbano.
Las personas mayores padecen
del maltrato físico, psicológico, social, más que el resto de la población por
discriminación debido a su edad avanzada, fenómeno que se observa en todo el
mundo, también en la ciudad de Rosario.
La Argentina suscribió un
compromiso social enmarcado en el Plan de Acción sobre el Envejecimiento de
Madrid del año 2002 que rige actualmente todas las políticas universales en
este tema, específicamente sobre el maltrato y calidad de vida de los mayores.
Como no tienen
representaciones sindicales poco pueden reclamar para actualizar sus haberes,
aquellos que quieren laborar son apartados por su edad y
La atención que reciben en
comercios, hospitales, instituciones, en muchas oportunidades son también
discriminados por su edad, y en lugar de brindar respeto, trato digno y humano
se transforman en el mejor de los casos en conmiseración, lástima o
minimización de sus necesidades.
Sobre el maltrato
mencionado, se suma las dificultades cuando no penurias para poder realizar sus
compras y el tiempo que deben disponer para ello, en la creencia que sus
tiempos poco valor tienen. Asimismo, permanecer mucho tiempo, (más de 20
minutos) en un multitud, incrementa los riesgos de adquirir enfermedades que
pueden ser letales, como la neumonía, sarampión, gripe en los mayores.
Asimismo, muchos tienen dificultades para estar en posición bípeda esperando
prolongadamente en las colas y esos sitios desprovistos de asientos adecuados.
la ciudad de Rosario debe
entonces involucrarse en esta problemática de sus mayores y encontrar medidas
que aporten una consideración ética adecuada a los mayores que produzcan un
respeto a su dignidad como personas y habitantes de Rosario, y que sientan que
sus gobernantes tienen la preocupación para que mejoren su calidad de vida y combatamos el
maltrato y la discriminación por la
edad.
Además, lo importante no es
solamente que este Cuerpo Legislativo redacte una nueva Ordenanza al respecto,
sino ver, que sea posible su real y efectivo cumplimiento que redunde
auténticamente en procurar un cambio social decente haciendo desaparecer las
inhumanas colas de los mayores que deben hacer para adquirir sus alimentos
en los supermercados por ser muy
injustos.
El Departamento Ejecutivo
Municipal deberá concertar con las autoridades de los supermercados de la
ciudad de Rosario las medidas debidas ante la necesidad de la adaptación para
las personas mayores, y cambiar el paradigma actual referente al mejoramiento
de la atención de los mayores.”
La Comisión ha creído
conveniente producir despacho favorable
y en consecuencia propuso para su aprobación el siguiente proyecto de:
DECRETO
Artículo 1º.- Encomiéndase
al Departamento Ejecutivo Municipal, que a través de la repartición que
corresponda, realice las gestiones necesarias a los fines de que los
supermercados de la ciudad implementen las siguientes medidas:
a) que dispongan un cajero
que sea prioritario para los mayores de 65 años;
b) que los carteles
indicativos que existan en el comercio y los precios se dispongan con
caracteres de tamaño grande fácilmente visibles por todas las personas en
general;
c) que se pongan a
disposición la cantidad de baños necesarios en el mismo nivel de atención al
público y acorde al volumen de personas que atienden, con indicaciones de
carteles en caracteres grandes para que sean fácilmente indentificados.