La decisión fue tomada por el juez de Instrucción Gustavo Pérez Urrechu. En marzo de 1997 en Rosario, el acusado atropelló y mató a dos chicas. Hace 17 años que permanece prófugo.
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| Sebastián Pira - Foto: La Capital |
La causa contra Sebastián Pira, el hombre que en 1997 atropelló y mató a
dos chicas en Rosario mientras corría una picada, quedó impune al
prescribir la causa.
La prescripción fue dictada por el juez de Instrucción Gustavo Pérez Urrechu, dejandose sin efecto el pedido de captura internacional contra Pira por el delito de homicidio culposo.
El 2 de marzo de 1997 en la ciudad de Rosario, Pira corría una picada a 130 kilómetros por hora a bordo de un Ford Galaxy.
En el cruce de la calle Salta y el boulevard Oroño, embistió y mató a María Celeste Haiek, de 22 años, y a Daniela Caruso, de 16.
Pira se entregó unos días más tarde y fue imputado de homicidio culposo en el caso de Haiek y de homicidio simple en el caso de Caruso.
Luego, huyó del país cuando la Cámara de Apelaciones en lo Penal resolvió que debía quedar preso.
En 2001 fue recapturado en el aeropuerto de Amsterdam cuando intentaban subirse a un avión con destino a Israel, sin embargo, ante la demora de las tramitaciones de extradición, un juez de ese país le concedió la libertad condicional por lo que volvió a escapar.
Si bien la prescripción fue declarada por la Justicia de Rosario en 2009, el pedido de captura internacional se mantuvo por la revocación del fallo por parte de la Cámara Penal.
La prescripción fue dictada por el juez de Instrucción Gustavo Pérez Urrechu, dejandose sin efecto el pedido de captura internacional contra Pira por el delito de homicidio culposo.
El 2 de marzo de 1997 en la ciudad de Rosario, Pira corría una picada a 130 kilómetros por hora a bordo de un Ford Galaxy.
En el cruce de la calle Salta y el boulevard Oroño, embistió y mató a María Celeste Haiek, de 22 años, y a Daniela Caruso, de 16.
Pira se entregó unos días más tarde y fue imputado de homicidio culposo en el caso de Haiek y de homicidio simple en el caso de Caruso.
Luego, huyó del país cuando la Cámara de Apelaciones en lo Penal resolvió que debía quedar preso.
En 2001 fue recapturado en el aeropuerto de Amsterdam cuando intentaban subirse a un avión con destino a Israel, sin embargo, ante la demora de las tramitaciones de extradición, un juez de ese país le concedió la libertad condicional por lo que volvió a escapar.
Si bien la prescripción fue declarada por la Justicia de Rosario en 2009, el pedido de captura internacional se mantuvo por la revocación del fallo por parte de la Cámara Penal.