Misiones
El temor por posibles nuevos ataques de palometas hizo que las
concurridas playas de Miguel Lanús, ubicadas en la zona sur de Posadas,
estén desiertas en la jornada de ayer.
Mientras tanto, especialistas convocados por la Municipalidad de Posadas intentaron explicar los ataques de los peces que dejaron un saldo de cinco personas lesionadas durante el jueves. Así, agentes comunales tomaron muestras del agua para estudiar el fenómeno de las palometas.
Los hospitales de todas las zonas costeras, tanto del Paraná, como del Uruguay, están en alerta y deben reportar al Ministerio de Salud la aparición de pacientes con mordedoras de peces.
En San Ignacio, los guardavidas del Club del Río y de la Playa del Sol estuvieron alertas para resguardar a los veraneantes.
En la Playa del Sol además se realizó un plan de contingencia con sus bañeros y resolvieron correr el boyado más cerca de la costa, para poder evacuar mas fácilmente en caso de algún posible ataque.
El licenciado en genética, Danilo Aichino, integrante del Proyecto de Biología Pesquera Regional, perteneciente a la Facultad de Ciencias Exactas de la Unam, explicó que “las palometas y las pirañas pertenecen a dos grupos distintos de peces dentro de la misma familia. Las palometas son omnívoras y se las distingue por sus dientes en forma de muelas, los cuales están preparados para triturar frutos, moluscos, etcétera, en tanto que las pirañas son carnívoras y tienen una dentadura para cortar bocados de músculos en el caso de adultos o aletas de peces en los juveniles”.
“Dentro de las pirañas hay tres especies de las cuales dos frecuentan nuestra ribera en cardúmenes y se las denomina científicamente como Serrasalmus marginatus y Serrasalmus maculatus, siendo esta última una de las principales causante de mordeduras en bañistas”, agregó.
El investigador aseguró que dichas especies siempre estuvieron presentes en el río, pero las condiciones que propiciaron los ataques se podrían dar porque son especies que cuidan los lugares de desove (puesta de huevos). “Son en zonas de abundante vegetación como camalotes, pero en estos últimos tiempos el incremento del embalse ha inundado la zona de pastizales y arbustos, los cuales en algunos sectores todavía no han desaparecido en su totalidad, esta vegetación junto a la vegetación sumergida generan también lugares propicios para la reproducción de las mismas”.
Asimismo, afirmó que “estos peces siempre atacaron, pero fueron casos aislados. Ellas son territoriales, es decir protegen el lugar en donde van a desovar”.
Aichino dijo que “lo ocurrido en Villa Lanús se debe principalmente a la gran cantidad de vegetación semisumergida. Por ello, se aconseja no ingresar en zonas donde exista vegetación flotante como camalotes o zonas con abundante vegetación sumergida”.
Vecinos de Candelaria afirmaron a El Territorio que el jueves estaban pescando en la costa y una hora antes de los ataques en Miguel Lanús vieron pasar un cardumen de palometas por la zona.
El biólogo Miguel Rinas, director de El Puma de Candelaria, comentó que “estamos en época de desove y es normal que se muevan en cardúmenes, de palometa o de cualquier especie; hay que investigar”.
En Rosario
Ayer por la tarde otra vez las palometas atacaron en La Rambla Catalunya, como ya sucedió el miércoles, jueves y viernes.Esta vez un niño de 10 años sufrió la mordedura en su mano derecha.
El Personal de la Guardia Urbana Municipal trasladó al nene herido hasta el hospital Víctor J. Vilela, donde se le practicaron curaciones en el dedo meñique de su mano derecha. Luego recibió el alta y regresó con su padre a su hogar, del barrio Cabín 9.
Mientras tanto, los bañistas reclaman al municipio que se instale una malla protectora en la zona habilitada del balneario para impedir hechos similares donde ya han sido atacadas por estos peces 70 bañistas.
Luego de conocerse que el jueves cinco personas sufrieron
el ataque de estos peces, vecinos prefirieron no ingresar al río. Salud Pública
declaró el alerta a toda la provincia
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| Mirada atenta.Por miedo, el balneario de Miguel Lanús (foto), donde se registró el ataque no tuvo visitantes. Foto: Facundo Correa - Territorio Digital |
Mientras tanto, especialistas convocados por la Municipalidad de Posadas intentaron explicar los ataques de los peces que dejaron un saldo de cinco personas lesionadas durante el jueves. Así, agentes comunales tomaron muestras del agua para estudiar el fenómeno de las palometas.
Los hospitales de todas las zonas costeras, tanto del Paraná, como del Uruguay, están en alerta y deben reportar al Ministerio de Salud la aparición de pacientes con mordedoras de peces.
En San Ignacio, los guardavidas del Club del Río y de la Playa del Sol estuvieron alertas para resguardar a los veraneantes.
En la Playa del Sol además se realizó un plan de contingencia con sus bañeros y resolvieron correr el boyado más cerca de la costa, para poder evacuar mas fácilmente en caso de algún posible ataque.
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| Serrasalmus maculatus |
El licenciado en genética, Danilo Aichino, integrante del Proyecto de Biología Pesquera Regional, perteneciente a la Facultad de Ciencias Exactas de la Unam, explicó que “las palometas y las pirañas pertenecen a dos grupos distintos de peces dentro de la misma familia. Las palometas son omnívoras y se las distingue por sus dientes en forma de muelas, los cuales están preparados para triturar frutos, moluscos, etcétera, en tanto que las pirañas son carnívoras y tienen una dentadura para cortar bocados de músculos en el caso de adultos o aletas de peces en los juveniles”.
“Dentro de las pirañas hay tres especies de las cuales dos frecuentan nuestra ribera en cardúmenes y se las denomina científicamente como Serrasalmus marginatus y Serrasalmus maculatus, siendo esta última una de las principales causante de mordeduras en bañistas”, agregó.
El investigador aseguró que dichas especies siempre estuvieron presentes en el río, pero las condiciones que propiciaron los ataques se podrían dar porque son especies que cuidan los lugares de desove (puesta de huevos). “Son en zonas de abundante vegetación como camalotes, pero en estos últimos tiempos el incremento del embalse ha inundado la zona de pastizales y arbustos, los cuales en algunos sectores todavía no han desaparecido en su totalidad, esta vegetación junto a la vegetación sumergida generan también lugares propicios para la reproducción de las mismas”.
Asimismo, afirmó que “estos peces siempre atacaron, pero fueron casos aislados. Ellas son territoriales, es decir protegen el lugar en donde van a desovar”.
Aichino dijo que “lo ocurrido en Villa Lanús se debe principalmente a la gran cantidad de vegetación semisumergida. Por ello, se aconseja no ingresar en zonas donde exista vegetación flotante como camalotes o zonas con abundante vegetación sumergida”.
Vecinos de Candelaria afirmaron a El Territorio que el jueves estaban pescando en la costa y una hora antes de los ataques en Miguel Lanús vieron pasar un cardumen de palometas por la zona.
El biólogo Miguel Rinas, director de El Puma de Candelaria, comentó que “estamos en época de desove y es normal que se muevan en cardúmenes, de palometa o de cualquier especie; hay que investigar”.
En Rosario
Ayer por la tarde otra vez las palometas atacaron en La Rambla Catalunya, como ya sucedió el miércoles, jueves y viernes.Esta vez un niño de 10 años sufrió la mordedura en su mano derecha.
El Personal de la Guardia Urbana Municipal trasladó al nene herido hasta el hospital Víctor J. Vilela, donde se le practicaron curaciones en el dedo meñique de su mano derecha. Luego recibió el alta y regresó con su padre a su hogar, del barrio Cabín 9.
Mientras tanto, los bañistas reclaman al municipio que se instale una malla protectora en la zona habilitada del balneario para impedir hechos similares donde ya han sido atacadas por estos peces 70 bañistas.