ATAQUE AL GOBERNADOR
ATAQUE AL GOBERNADOR
Está vinculado a la barra
brava de Central; no descartan investigar a la policía
Uno de los autores
materiales de los disparos contra el domicilio del gobernador de Santa
Fe, Antonio Bonfatti, dos
semanas atrás, fue identificado ayer como Brian González, un hombre con una
larga lista de antecedentes penales y ligado al jefe de la barra brava de Rosario
Central, Andrés "Pillín" Bracamonte.
Fuentes de la Justicia
dijeron a LA NACION que González está siendo buscado intensamente por orden de la jueza de instrucción
N° 5 de Rosario, María Luisa Pérez Vara, y por pedido de un equipo de fiscales.
Aunque las fuentes consultadas no descartan ninguna línea de investigación, las
miradas judiciales también empezaron a centrarse en las propias filas de la
policía santafesina.
La investigación llegó hasta
González, conocido en el mundo del delito como "el Gordo Brian", a
través de una prueba sustancial: un proyectil calibre 9 milímetros, que fue
encontrado frente a la casa de Bonfatti durante los peritajes.
Esa bala fue
percutada por la misma arma que se usó en un crimen que ocurrió el 7 de
septiembre pasado -cuatro días antes del ataque al gobernador de Santa Fe-.
González es el principal sospechoso de asesinar con una pistola 9 milímetros a Marcelo
Flavio Giménez, de 52 años. Los proyectiles que se hallaron tanto en este
homicidio como frente al domicilio de Bonfatti fueron sometidos a peritajes que
confirmaron que fueron disparados por la misma pistola usada por "el Gordo
Brian".
González está siendo buscado
por orden de la jueza de Instrucción N° 5 María Luisa Pérez Vara y por pedido
de un equipo de fiscales, coordinados por el procurador general de la Corte
Suprema, Jorge Barraguirre, que llevan adelante la investigación. Anteayer la
Tropa de Operaciones Especiales (TOE) y la División Judicial de la Unidad
Regional II realizaron once allanamientos en distintos domicilios de Rosario y
Granadero Baigorria. Tres personas quedaron detenidas y ayer fueron indagadas
por la magistrada.
Tras tener identificado al
presunto autor material del atentado, en la Justicia deben avanzar ahora sobre
el ideólogo del ataque a balazos contra el domicilio de Bonfatti el 11 de
septiembre pasado. En el frente de la casa quedaron las marcas de siete proyectiles,
y tres ingresaron por la puerta y la ventana del living, donde el gobernador se
encontraba esa noche junto con su pareja Silvia Tróccoli mirando televisión.
Los investigadores tienen la
certeza de que González es un sicario y que disparó contra la vivienda de
Bonfatti "porque fue contratado por dinero". Desde un principio, la
hipótesis más fuerte que surgió en el marco de la investigación apuntó a los
grupos narcocriminales, que durante los dos últimos años fueron protagonistas
de la violencia en Rosario.
Aunque las fuentes
consultadas no descartan ninguna línea de investigación, las miradas en la
Justicia comenzaron a centrarse en las propias filas de la policía santafecina.
Una semana después del atentado, el ministro de Gobierno, Rubén Galassi,
deslizó esta hipótesis, al advertir: "No descartamos que haya personal de
la estructura policial que esté vinculado, junto con los líderes de la banda
Los Monos que han caído".
Esta pista vincula el ataque
a Bonfatti con una disputa interna en la que se dirime la futura conducción de
la Policía de Investigaciones, una fuerza especializada que será clave en el
nuevo sistema procesal penal que comenzará a regir en febrero próximo.
Ayer la Tropa de Operaciones
Especiales (TOE) allanó la comisaría 10a del barrio de Alberdi, que tiene
jurisdicción en la zona donde vive Bonfatti. En un auto que se encontraba en el
patio de esta dependencia policial se incautó una pistola 11.25. Dos mensajes
anónimos que llegaron a la TOE indicaron que ese revólver es el que "se usó"
en el ataque contra Bonfatti.
La jueza Pérez Vara ordenó un allanamiento en la
comisaría y pidió que quedaran incautados los teléfonos celulares de todos los
policías, que a partir de hoy serán sometidos a peritajes.
Fuente: La Nación