Tragedia en el International Park
"Tengo la impresión de que el municipio intenta evitar la discusión. No puede haber impunidad frente a un caso tan grave, porque la impunidad es la garantía para que nada cambie"
Frente
a declaraciones de la Intendenta Mónica Fein reconociendo que el Estado debe
tener un rol más presente en la prevención y el desarrollo armónico de la
ciudad, la concejala radical María Eugenia Schmuck, sostuvo que es "preocupante que responsables del
Ejecutivo hablen como espectadores, cuando deberían asumir errores graves en
los sistemas de control de municipio y determinar responsabilidades. En la
tragedia del International Park hay responsabilidades concretas. Hay que
determinarlas y establecer las sanciones que correspondan"
Para
Schmuck, "cuando la Intendenta dice
que hay que replantear las responsabilidades que delegamos en el privado, omite
reconocer que el Estado, por su propia naturaleza, nunca cede el ejercicio del
poder de policía. Esto es básico en el derecho administrativo y parece
desconocerlo".
"El municipio nunca
delega el poder de policía. En el caso de una concesión de un espacio público,
el poder concedente es quién tiene la responsabilidad del control. En el
caso particular del International Park, está expresamente establecido en el
pliego de la licitación, donde claramente el Ejecutivo es responsable de
controlar",
amplió la concejala.
"Del análisis del
pliego surgen serias irregularidades de la que nadie parece hacerse
cargo. El apoderado de la firma era quién hacía los informes. Era demás un
ingeniero civil, no mecánico. Lo que presentaba era una memoria descriptiva, no
un informe técnico evaluando el estado de los juegos. Y todo esto era
convalidado por diferentes áreas del municipio que no solicitaban peritaje sino
que hacían propios los informes de la firma que explotaba el parque", recordó la concejala.
"Hay responsables
políticos concretos y se ha demostrado negligencia. No aplicaron controles
exhaustivos y fueron condescendientes con un privado que usufructúa un espacio
público. Esto implica reconocer serias falencias en los sistemas de control y
si la máxima autoridad municipal no se hace cargo, es muy difícil que esto
cambie", sostuvo
Schmuck quién reclamó una "reforma
profunda de los sistemas de control" y señaló que hay que "revisar
errores en la planificación de la ciudad. Rosario creció en las últimas décadas
y ni los servicios, ni los sistemas de control, fueron pensados para acompañar
ese crecimiento".