0 puntos. Dos partidos, dos derrotas
Fuera de los JJOO. La 'rojita'
ha perdido contra Honduras, suma su segunda derrota y vuelve a casa. 0
puntos. Dos partidos, dos derrotas. Fracaso olímpico, decepción enorme.
Aunque la segunda parte fue de España, aunque golpeó tres balones en los palos, aunque le hicieron un penalti a Rodrigo de libro y otro a Adrián que tampoco señaló. Perdió la 'rojita' regalando 45 minutos y un partido.
En un torneo tan corto no puedes cometer esos fallos. Milla cometió el mismo error que contra a Japón, se obstinó en dejar a Ander Herrera en el banquillo, el jugador que puede hacer mejor de Thiago, colocó a Javi Martínez
de pivote por delante de la defensa y pobló el medio campo de
futbolistas que se mueven bien detrás del punta pero que no se asocian
con facilidad.
España, imprecisa de inicio
La imprecisión en la salida de balón era tan grave que la selección
hondureña se crecía y no tardó en llegar el gol de Honduras a los siete
minutos de juego, un centro de Espinoza al goleador Bengtson, que supera por cuerpo a Jordi Alba
y remata a placer. ¿Los centrales de España? Desubicados y desplazados,
y eso que el hondureño ya había marcado dos goles a Marruecos así que
todos conocían su facilidad rematadora.
La olímpica española no mejoraba, lenta, no entraba en juego Muniain porque no le llegaban balones, Mata a la desesperada disparaba desde fuera del área pero todo a un ritmo demasiado lento, demasiado cansino. En el 28, una combinación entre Montoya y Mata
con remate del campeón del mundo pareció animar a la selección, ocho
minutos después Mata la cruzaba de nuevo pero se marchaba por poco.
Mucha crispación en el campo, fea entrada de Montoya a Espinoza
y en el descanso, tángana en el túnel del vestuario por una perdida de
tiempo hondureña… demasiados nervios en nuestra selección.
Milla reacciona tras el descanso
El seleccionador corrigió en la media parte y dejó en vestuarios a Koke para darle el control del equipo a Ander Herrera
e intentar cambiar las dinámicas. Honduras ralentizaba su juego pero no
le impedía gozar de una oportunidad tremenda en el 50, con una jugada
espectacular de Martínez que dejaba para Espinoza y remataba al poste.
Ander Herrera le impuso ritmo al partido y la selección daba otra imagen. Dos ocasiones consecutivas de Adrián,
la primera que golpea en el larguero, metían a la selección en el
partido. La selección la empezó a tocar bien, muy bien, con fantásticas
aproximaciones a la portería. En el minuto 67, Muniain con una jugada
personal espectacular estrella el balón al palo. Con Ander era otra selección, es tan inteligente el jugador del Athletic que hacía jugar a todos. Le puso un balón a Rodrigo en el 71 que Mendoza salva de milagro y así era una y otra vez. Consiguió Herrera que Muniain y Mata se asociaran,
por fin jugaba la selección española. Rodrigo, que había entrado por
Isco, se quedaba sólo ante el portero hondureño y la jugada inmediata un
claro penalti a Adrián no lo vió el árbitro.
Se sumaban las ocasiones de gol, la más clara, Rodrigo que sólo tenía que bajarla y la estrelló en el travesaño. Los postes castigaban a la selección olímpica. El último cambio de Milla, Tello por Javi Martínez
para buscar a la desesperada el gol. Demasiado tarde el cambio y
dejando fuera a un hombre alto que podía rematar en área. Y la jugada
que habría podido cambiar el partido, penalti clarísimo de Velasquez a Rodrigo que no lo ve el árbitro.
¡Fracaso y mala imagen de la rojita!
La rojita ha dicho adiós a los Juegos al perder ante Honduras. Otra
vez los centroamericanos han dado la sorpresa ante España como hace 30
años, en el Mundial de 1982, cuando un gol de ¿Macho¿ Figueroa logró un
sorprendente empate que le complicó la vida a la selección. El equipo
olímpico ha fracasado sin excusas, perdiendo ante Japón y Honduras, sin
ser capaces de marcar un solo gol. La rojita ha rematado tres veces a
los palos, le han birlado dos penalties, pero eso no es excusa a su
flojo nivel ofrecido en todo el torneo.
Lo peor es la imagen que ha dado, impropia de un fútbol que es campeón
del Mundo y de Europa, con un desquiciado Muniain que empujó al árbitro y
corre el riesgo de una dura sanción de la FIFA. El joven cachorro ha
perdido los papeles de una forma increíble siendo secundado por varios
de sus compañeros al final del partido.
Tampoco la dirección técnica de Luis Milla ha brillado con decisiones
absurdas, con alineaciones sin ton ni son, con cambios sin sentido. La
rojita es mejor equipo que lo visto en Inglaterra, muy lejos de su
brillante Europeo sub 21. La ausencia de Thiago se ha notado y Ander
Herrera merecía mucho mayor protagonismo que el que le ha dado su
técnico olímpico, a pesar de la pubalgia que arrastra.
Quienes colgaron antes de tiempo la medalla de oro en el cuello, ahora
les ¿masacrarán¿, pero lo cierto es que los torneos no se ganan por el
simple hecho de lucir la misma camiseta que la roja de Vicente del
Bosque. Para jugar como la roja hace falta mayor categoría en el bloque
de futbolistas y, sobre todo, experiencia, en los jóvenes jugadores de
la Olímpica. Todavía les queda mucho camino por recorrer para quitarles
el sitio a los mayores de España.
Y a Luis Milla mucho aprendizaje en su carrera.