El ministro del Interior, Florencio Randazzo, anunció que se extenderán los puestos de trámites para que los ciudadanos argentinos puedan renovar sus pasaportes en cuestión de minutos dentro del propio aeropuerto desde el que partirán.
El titular de la cartera política explicó en una entrevista concedida ayer a Canal 26 cuáles son las características de los nuevos documentos, tanto el DNI tarjeta como el pasaporte.Entre las novedades, anticipó que, además del Aeropuerto de Ezeiza, otros aeropuertos internacionales tendrán puestos donde tramitar el pasaporte instantáneo, que se entrega en el lapso de una hora y tiene un costo adicional de 200 dólares.
“El pasaporte tiene varias modalidades que nosotros hemos resuelto definitivamente. Porque era un viacrucis para un ciudadano tener que sacar este documento de viaje”, se congratuló Randazzo.
“Pusimos las más de tres mil bocas que hoy tiene el Ministerio para la emisión del documento y las pusimos para que puedan confeccionar el pasaporte”, explicó para luego detallar las tres clases de documento que se pueden solicitar.
“Hay un pasaporte ordinario que vale 250 pesos y que tarda un plazo de 15 días. Hay un pasaporte exprés que tiene un sistema de pre-pago que vale 500 pesos adicionales y tarda 48 horas. Y hay un pasaporte instantáneo, que funciona en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza”.
Al respecto, subrayó que a este último “lo vamos a extender al resto de los aeropuertos internacionales en los próximos días, que se saca en ese mismo momento y que tiene un adicional de 200 dólares para quien se lo olvidó o lo tiene vencido. Tiene la oportunidad de sacarlo en ese momento, en el plazo de una hora”.
Asimismo, explicó en qué consiste la aceleración del trámite para los migrantes en el aeropuerto. “Hemos modificado los trámites migratorios. Hemos dejado de lado el papel para que ese trámite sea absolutamente moderno, con el uso de la tecnología”.
“Hoy cuando uno hace migraciones se van a dar cuenta de que ya no se hace más de forma manuscrita la tarjeta migratoria, sino que hay un soporte tecnológico que le saca una foto, toma datos faciales, le escanea el documento, se lo valida con la impresión dactilar. Ese trámite tarda 28 segundos, es mucho más sencillo, más rápido y por sobre todas las cosas es mucho más seguro”, aseguró.
Por otra parte, el ministro explicó los cambios en la tramitación del Documento Nacional de Identidad. “El DNI celeste no se hace más”, reiteró.
Arguyó la medida en que “nosotros empezamos con un proceso del nuevo Documento Nacional de Identidad que tiene que ver con una política de inclusión, que resolvimos problemas históricos y lo hicimos con el 1,5% de lo que salió el contrato sin el Ministerio del Interior: 1.260 millones de dólares contra 18.600 mil dólares”.
“Fabricamos el nuevo documento pero en aquel momento dijimos, aplicando el sentido común, hagamos un formato tarjeta con la libreta porque mucha gente sacaba la cédula federal a propósito de que era un soporte mucho más práctico”, dijo Randazzo.
“Entonces, ahí nos dimos cuenta de que con el transcurso del tiempo tenía una enorme aceptación el DNI tarjeta y no tenía sentido confeccionar una libreta para que, en realidad, sea utilizada cada dos años cuando uno concurre a votar”.
Aclaró, entonces, que “lo que establece la reforma del Código Electoral es reemplazar el mecanismo de sellado en el voto por otro y deja abierta una reglamentación. Esto se lleva adelante con la Cámara Electoral Nacional”.
“Nosotros lo que proponemos es que el padrón sea confeccionado con un código de barras y cuando termina el acto comicial este padrón que se envía a la Junta Electoral sea escaneado y que la Justicia Electoral conforme un padrón de no votantes que lo pone a disposición de todos aquellos organismos desde los cuales se le exige a los ciudadanos cumplir con el deber cívico. Hay que resolverle a la vida al ciudadano común, no complicársela”, apuntó.
El ministro del Interior destacó que “lo más importante acá es que estamos reemplazando un mecanismo que era demasiado oneroso para el Estado, como lo es la confección de una libreta, y a parte era poco seguro, por un documento nuevo, moderno y que permite constatar a través del uso de la tecnología”.
Y finalizó explicando que “por ahora sirve el DNI viejo” y que “hoy tenemos 15 millones de nuevos DNI entregados a los ciudadanos. Ese documento le sirve igual que la nueva tarjeta porque es exactamente lo mismo, con la diferencia de que en este caso ese ciudadano tiene tarjeta y libreta. Pueden convivir”.
“Pero vamos a un proceso por el cual los 40 millones de argentinos tengan el nuevo DNI, entonces tenemos una base de datos biométricos que nos sirven absolutamente para todo como, por ejemplo, la clarificación del delito porque tenemos los datos faciales, biométricos, la firma digital de cada ciudadano”, ejemplificó.