Esta semana se produjeron dos hechos trascendente en Rosario, en cuanto al pedido de Justicia afectados por la inseguridad.El caso de los tres chicos asesinados en la noche del 1º de enero donde se habían reunidos para festejar la llegada del año nuevo,aunque esta vez "año nuevo,vida nueva" el destino le deparó pasar a otra vida.
Pasó un mes para que sus reclamos sean escuchados, pasaron tres jueces en la causa, dos por estar en feria y el último se hizo cargo de la causa.
una causa que empezaba a ponerse lenta.Tuvo que ocurrir que caiga herido uno de los implicados para hablar de nuevo del tema.No bastó, la gente volvía a concentrarse como los primeros días para exigir a las autoridades judiciales que este hecho no quedase impune. Una noche de vigilia debieron soportar los presentes. Un juez que toma la causa y apresa a otro de los implicados de la noche del crimen.
Mientras las redes sociales explotaban apoyandolos para que se esclarezca el hecho. Por otro lado asesinaban a otra víctima inocente ,un joven con mucho porvenir y grandes sueños, le arrancaban su vida.
Mientras un periódico matutino publicaba en sus páginas otro hecho de ajuste de cuenta, cuando deberían investigado más y no publicar lo que les dictan.Pudo quedar resuelto el hecho ahí.
Cómo este joven podía ser "ajusticiado" por otro. si no tenia antecedentes ni problemas con nadie. o sea, fue una persona atacada para robarla. Pareciera ser que es mas fácil implicar a la víctima de un delito como "ajuste de cuenta", que investigar las causas.
Para algunos hechos que se dan a la opinión publica aveces genera confusión, ya los testigos no miran para otro lado.
Hace días alguien decía "Acostumbremonos a como se vive en México" donde guerrillas armadas luchan por el poder del narcotráfico, como está ocurriendo en diversos barrios de la ciudad que no ingresan las ambulancias, ni lo efectivos policiales para patrullar.Estas bandas se manejan con total impunidad, cuya "justicia" se hace con sus propios códigos. Un poder que se acrecienta día a día y va ocupando un mayor espacio en el conurbano, donde hechos son jamás denunciados.
Nuevas bandas se van incorporándose como los "Cambichitos" pequeñas bandas formadas por menores de edad.Como las que se formaban en las fávelas de Brasil,eran incorporados como soldaditos de los narcos hasta que se independizan. están comenzando a dar sus primeros saltos, donde tienen atemorizados a un sector de la zona sur.El miedo de la gente cuando se animan hablar comentan " esos son los más peligrosos ya que no tienen códigos y uno no sabe como va a reaccionar frente a ellos.Total tienen todo grado de impunidad.
Yo no quiero vivir como en México, cuando hoy a pesar de que algunos jueces pueden aplicar las leyes para que estos hechos disminuyan y funcionarios de gobierno actúen para que sus ciudadanos , que pagan sus servicios puedan ser retribuídos con mayor seguridad.
¿Quién no ha sufrido un delito o personas cercanas le haya ocurrido?. ¿Cuántos jóvenes son robados para quitarles sus celulares o zapatillas? ¿Cuántas mujeres son arrastradas por el piso para quitarle lo poco que lleva en su cartera? O comerciantes que ya no saben como ir abrir su negocio para no ser asaltado y decir "Gracias a Dios hoy no me mataron". también los que salen para disfrutar un domingo o fin de semana, cuando regresa dice "Que suerte hoy no entraron a mi departamento a robarme". de estos hay cientos de historias donde cada ciudadano que fue víctima tiene que contar. Otros lamentablemente no.
Es por eso que los vecinos salieron a ocupar las calles, a reclamar sus derechos.En la marcha del jueves no solo había niños y ancianos que acompañaban, sino que también salió la gente que ve pasar su vida a través de una pantalla o desde una ventana para reclamar sus derechos. Ya no cierran la ventana cuando ven un hecho.Quedó atrás el "total le pasó al de al lado", pero ese al lado ya no está.Hoy me toca a mi.
No bastó con sacar a un comisario, y tomarlo como un fusible por parte de las autoridades para aplacar los ánimos de los vecinos y que los reclamos vayan desapareciendo con el correr de los días en la opinión pública. ¿ El problema está en el fusible o en el tablero?. Porqué no tratamos de ver el problema más allá y trabajar mancomunada con la gente.Que el funcionario público se involucre, no tape con parches y de soluciones, que por ahora no las hay.
Jorge Díaz Editorial "Algo en común" sábado 4 de febrero de 2012
Pasó un mes para que sus reclamos sean escuchados, pasaron tres jueces en la causa, dos por estar en feria y el último se hizo cargo de la causa.
una causa que empezaba a ponerse lenta.Tuvo que ocurrir que caiga herido uno de los implicados para hablar de nuevo del tema.No bastó, la gente volvía a concentrarse como los primeros días para exigir a las autoridades judiciales que este hecho no quedase impune. Una noche de vigilia debieron soportar los presentes. Un juez que toma la causa y apresa a otro de los implicados de la noche del crimen.
Mientras las redes sociales explotaban apoyandolos para que se esclarezca el hecho. Por otro lado asesinaban a otra víctima inocente ,un joven con mucho porvenir y grandes sueños, le arrancaban su vida.
Mientras un periódico matutino publicaba en sus páginas otro hecho de ajuste de cuenta, cuando deberían investigado más y no publicar lo que les dictan.Pudo quedar resuelto el hecho ahí.
Cómo este joven podía ser "ajusticiado" por otro. si no tenia antecedentes ni problemas con nadie. o sea, fue una persona atacada para robarla. Pareciera ser que es mas fácil implicar a la víctima de un delito como "ajuste de cuenta", que investigar las causas.
Para algunos hechos que se dan a la opinión publica aveces genera confusión, ya los testigos no miran para otro lado.
Hace días alguien decía "Acostumbremonos a como se vive en México" donde guerrillas armadas luchan por el poder del narcotráfico, como está ocurriendo en diversos barrios de la ciudad que no ingresan las ambulancias, ni lo efectivos policiales para patrullar.Estas bandas se manejan con total impunidad, cuya "justicia" se hace con sus propios códigos. Un poder que se acrecienta día a día y va ocupando un mayor espacio en el conurbano, donde hechos son jamás denunciados.
Nuevas bandas se van incorporándose como los "Cambichitos" pequeñas bandas formadas por menores de edad.Como las que se formaban en las fávelas de Brasil,eran incorporados como soldaditos de los narcos hasta que se independizan. están comenzando a dar sus primeros saltos, donde tienen atemorizados a un sector de la zona sur.El miedo de la gente cuando se animan hablar comentan " esos son los más peligrosos ya que no tienen códigos y uno no sabe como va a reaccionar frente a ellos.Total tienen todo grado de impunidad.
Yo no quiero vivir como en México, cuando hoy a pesar de que algunos jueces pueden aplicar las leyes para que estos hechos disminuyan y funcionarios de gobierno actúen para que sus ciudadanos , que pagan sus servicios puedan ser retribuídos con mayor seguridad.
¿Quién no ha sufrido un delito o personas cercanas le haya ocurrido?. ¿Cuántos jóvenes son robados para quitarles sus celulares o zapatillas? ¿Cuántas mujeres son arrastradas por el piso para quitarle lo poco que lleva en su cartera? O comerciantes que ya no saben como ir abrir su negocio para no ser asaltado y decir "Gracias a Dios hoy no me mataron". también los que salen para disfrutar un domingo o fin de semana, cuando regresa dice "Que suerte hoy no entraron a mi departamento a robarme". de estos hay cientos de historias donde cada ciudadano que fue víctima tiene que contar. Otros lamentablemente no.
Es por eso que los vecinos salieron a ocupar las calles, a reclamar sus derechos.En la marcha del jueves no solo había niños y ancianos que acompañaban, sino que también salió la gente que ve pasar su vida a través de una pantalla o desde una ventana para reclamar sus derechos. Ya no cierran la ventana cuando ven un hecho.Quedó atrás el "total le pasó al de al lado", pero ese al lado ya no está.Hoy me toca a mi.
No bastó con sacar a un comisario, y tomarlo como un fusible por parte de las autoridades para aplacar los ánimos de los vecinos y que los reclamos vayan desapareciendo con el correr de los días en la opinión pública. ¿ El problema está en el fusible o en el tablero?. Porqué no tratamos de ver el problema más allá y trabajar mancomunada con la gente.Que el funcionario público se involucre, no tape con parches y de soluciones, que por ahora no las hay.
Jorge Díaz Editorial "Algo en común" sábado 4 de febrero de 2012