El jefe de Gobierno envió a la Legislatura porteña un proyecto que
también penaliza a los manifestantes que circulen con palos o rostros
cubiertos en la ciudad.
Si bien el Gobierno porteño había anticipado la intención de que la Legislatura porteña volviera a tratar un proyecto para prohibir la actividad de “cuidacoches” y “limpiavidrios” el próximo año, Mauricio Macri ya mandó la iniciativa correspondiente.
La iniciativa propone modificar el Código Contravencional porteño, ocupándose especialmente de los que desarrollen la actividad sin permiso legal de cuidacoches y limpiavidrios.
El proyecto multa a quien circule a bordo de una moto con un acompañante por la zona del microcentro en horario bancario, como así también penaliza a manifestantes que obstaculicen el paso en la vía pública. Plantea además una sanción mayor para los que lo hagan con su rostro cubierto o portando palos, cadenas o bastones.
El proyecto encontró claramente un disparador en el homicidio de un cuidacoches registrado, precisamente a manos de un “colega” frente al Zoológico.
La iniciativa prevé la modificación de una serie de artículos de la actual Ley 1472, el Código de Contravenciones, que sanciona las conductas que por acción u omisión dolosa o culposa que implique daño o peligro cierto para los bienes jurídicos individuales o colectivos protegidos.
El proyecto del Pro considera contravención el uso del espacio público tanto por parte de los cuidacoches como los limpiavidrios, sin autorización. Como pena, deben pagar los infractores de uno a cinco días de arresto, o bien una multa que puede llegar a los 2.000 pesos. La sanción se triplica para aquella persona que sea identificada como jefe de una organización de esa actividad.
En cuanto a los motociclistas que lleven acompañantes en la zona del microcentro entre las 10 y las 16 en días hábiles, habría multas de hasta 4 mil pesos.
Aquellos manifestantes que impidan el tránsito vehicular serán pasibles de penas de uno a cinco días de trabajo de utilidad pública y multas de hasta mil pesos.
Las multas se triplican para aquellos manifestantes que lleven el rostro cubierto, o esgriman “de manera intimidante palos, bastones, cadenas o cualquier tipo de armas no convencional”.
Si bien el Gobierno porteño había anticipado la intención de que la Legislatura porteña volviera a tratar un proyecto para prohibir la actividad de “cuidacoches” y “limpiavidrios” el próximo año, Mauricio Macri ya mandó la iniciativa correspondiente.
La iniciativa propone modificar el Código Contravencional porteño, ocupándose especialmente de los que desarrollen la actividad sin permiso legal de cuidacoches y limpiavidrios.
El proyecto multa a quien circule a bordo de una moto con un acompañante por la zona del microcentro en horario bancario, como así también penaliza a manifestantes que obstaculicen el paso en la vía pública. Plantea además una sanción mayor para los que lo hagan con su rostro cubierto o portando palos, cadenas o bastones.
El proyecto encontró claramente un disparador en el homicidio de un cuidacoches registrado, precisamente a manos de un “colega” frente al Zoológico.
La iniciativa prevé la modificación de una serie de artículos de la actual Ley 1472, el Código de Contravenciones, que sanciona las conductas que por acción u omisión dolosa o culposa que implique daño o peligro cierto para los bienes jurídicos individuales o colectivos protegidos.
El proyecto del Pro considera contravención el uso del espacio público tanto por parte de los cuidacoches como los limpiavidrios, sin autorización. Como pena, deben pagar los infractores de uno a cinco días de arresto, o bien una multa que puede llegar a los 2.000 pesos. La sanción se triplica para aquella persona que sea identificada como jefe de una organización de esa actividad.
En cuanto a los motociclistas que lleven acompañantes en la zona del microcentro entre las 10 y las 16 en días hábiles, habría multas de hasta 4 mil pesos.
Aquellos manifestantes que impidan el tránsito vehicular serán pasibles de penas de uno a cinco días de trabajo de utilidad pública y multas de hasta mil pesos.
Las multas se triplican para aquellos manifestantes que lleven el rostro cubierto, o esgriman “de manera intimidante palos, bastones, cadenas o cualquier tipo de armas no convencional”.